miércoles, 5 de septiembre de 2012

Lady Windermere's Fan - Ernst Lubitsch - Texto


El abanico de Lady Windermere - Ernst Lubitsch
Director: Ernst Lubitsch.
Guión: Julien Josephson, basado en la obra homónima de Oscar Wilde.
Productora: Ernst Lubitsch para Warner Brothers Pictures.
Estreno: 1 de diciembre de 1925.
País: EEUU.

Lady Windermere recibe la visita de Lord Darlington, que le declara su amor, pero la muchacha le rechaza, refiriéndole que ama a su marido. A su vez, Lord Windermere es citado por una desconocida, Mrs Edith Erlynne, quien le confiesa que es la madre de su mujer. Gracias a los cheques de Lord Windermere, Mrs Erlynne lleva una vida extravagante, que la convierten en la comidilla de toda la ciudad y en la obsesión del millonario Lord Augustus Lorton.
Lady Windermere recibe de su marido un abanico como regalo de cumpleaños. Pero la actitud de éste para con Mrs Erlynne despiertan en su joven esposa dudas sobre su fidelidad. Su indignación crece cuando Mrs Erlynne se presenta en su fiesta de aniversario. Así que decide abandonar a su marido y acudir al domicilio de Lord Darlington, dejándole a aquel una nota. Mrs Erlynne, más pendiente del comportamiento de su hija que de las pretensiones matrimoniales de Lord Lorton, descubre la nota y parte tras los pasos de Lady Windermere. Cuando la encuentra, intenta convencerla para que vuelva con su marido y de que ella no tiene nada que ver con él. En ese momento llega Lord Darlington acompañado de los otros invitados, incluido Lord Windermere. Este, al descubrir allí el abanico de su esposa, pide explicaciones a Darlington. La disputa se interrumpe cuando, ante la sorpresa de todos, de la estancia contigua, surge Mrs Erlynne que dice haber tomado el abanico por equivocación.
Al día siguiente, Mrs Erlynne, antes de partir para Francia, se despide de Lady Windermere, quien desconocedora de su parentesco real, ha llegado a hacerse su amiga. En el portal de los Windermere, Mrs Erlynne se encuentra con Augustus, a quien la mujer consigue interesar de nuevo, fingiéndose indignada por su atrevimiento de anoche.

El cuarto film que Ernst Lubitsch rueda para la Warner Brothers está basado en la obra homónima del escritor británico Oscar Wilde. A pesar de constituir una adaptación bastante fiel a su original, la película no contiene ni un solo epigrama de Wilde, al considerarlos el realizador no adecuados para el cine mudo. El problema queda solventado por Lubitsch mediante una inteligente decisión: convertir la letra en imágenes.
Lady Windermere's fan no es sólo una realización de bella factura, en donde eficaces actores, elegantemente ataviados, se mueven entre lujosos decorados. Lubitsch consigue extraer todos los temas puestos en juego en la obra de Wilde y, tras limpiarlos cuidadosamente hasta dejarlos en estado puro, los reordena a placer y los intensifica. Así, la decadencia, el amor, el dolor, el duelo y la vergüenza pasan a formar parte del universo lubitschniano de una manera natural. Al trío clásico, ya presente en otras obras del realizador, se suma esta vez la decisiva presencia de un cuarto personaje: el de la señora Erlynne, madre de Lady Windermere. Introduciéndose en la hipócrita alta sociedad londinense, la señora Erlynne logrará ponerla en evidencia y manipularla a su antojo.
Lubitsch juega con el hecho de hacer su cómplice al espectador, mostrándole información que le es negada a los personajes. Al complicarse la trama, llega un momento en que la revelación inicial se muestra insuficiente para intuir el desenlace; pero de éste, sólo el realizador tiene la llave. Como una prolongación cinematográfica del gusto wilderiano por lo indirecto, Lubitsch realiza una creativa utilización del espacio en off llegando a dotarlo de vida, y una sugerente división del campo fílmico en diversos  subespacios. Con todo ello, también la personalidad visual de la película está asegurada. La cinta es elogiada por la crítica americana, que la selecciona entre las diez mejores películas del año.

Luis Enrique Ruiz
Obras Maestras del Cine Mudo










No hay comentarios:

Publicar un comentario